Ayer quedamos Jorge, Moncho, Fran y Chevi para rodar con las bicis de carretera por los Montes de Toledo.
Quedamos a las 08:15 de la mañana en Cobisa, la mañana es agradable pero a pesar de todo no sobran los manguitos, preparamos las bicis comprobando la presión de las ruedas, cadenas engrasadas, etc.
Fran ya tiene su bici nueva, que bonita es, negra con detalles en verde flúor, solo le faltan sus nuevas botas y primera sorpresa de la jornada, sus viejas calas no sirven para los pedales, por más que probamos no hay forma, la solución es que Fran eche la bici al coche y vaya a su casa en Argés, para cambiar los pedales por los de su vieja bici, cuando llegamos los demás a su casa ya está todo preparado para el cambio, los pedales están duros y mientras intentamos cambiarlos aparece Daniel que salía de ruta con su nueva bici de montaña, para a saludar y debido a su conocida destreza con las herramientas le toca a él cambiar los pedales.
Con todo solucionado y una hora después de lo previsto nos ponemos en marcha, salimos dirección a San Pablo de los Montes pasando por Layos, Pulgar, Cuerva y Ventas con Peña Aguilera, el trayecto transcurre sin ningún contratiempo, a buen ritmo y comentando lo que nos espera de allí en adelante.
Al llegar a San Pablo nos encontramos con el segundo contratiempo del día, pinchazo de Moncho, ningún problema, cambio de cámara y a continuar con la primera dificultad seria de la jornada, el Puerto del Robledillo, serán 5 km con rampas duras que llegan hasta el 15%.
En la ascensión el grupo se divide en dos parejas, yendo por delante Jorge y Chevi y unos metros más atrás Moncho y Fran, poco a poco nos vamos acercando a la cima, en la ascensión nos encontramos varios grupos de ciclistas, al llegar a la cima aprovechamos para reagruparnos y comer algo.
La bajada es muy rápida, peligrosa por momentos, con bastante pendiente y curvas muy cerradas, al llegar abajo aprovechamos una fuente natural para llenar los bidones.
Reanudamos la marcha rumbo a Retuerta de Bullaque con un ritmo bastante rápido y de allí a Navas de Estena donde preguntamos por la carretera que nos ha de llevar a Navahermosa, punto final de nuestra ruta, nos indican la dirección y nos encaminamos a la segunda y última dificultad montañosa de la jornada, el Risco de las Paradas.
Es un puerto largo de casi 10 km y en el que las rampas llegan al 11%, el puerto es menos duro que el anterior en cuanto a rampas, pero casi el doble de largo y sin ningún descanso, además al no conocerle se divisa a lo lejos lo que parece el fin del puerto pero al llegar allí curva a la derecha y a continuar, la carretera nos engañó dos veces, poco a poco llegamos a la cima Jorge y Chevi, allí paramos a reagruparnos, llevábamos ya 93 km y nos quedaban tan solo 12 para terminar, cuando llegaron Moncho y Fran nos comentan que Fran había tenido problemas de tirones y había tenido que parar para que no fueran a más, a pesar de todo continuó como el makina que es y logro coronar el puerto.
Desde allí nos lanzamos en un rápido descenso en el que las curvas eran más abiertas que en el anterior y en el que llegamos a alcanzar velocidades cercanas a los 80 km/h, concluido el descenso llegamos a nuestro destino, Navahermosa, donde nos esperaba la familia para comer, en total habían sido 105 km por los Montes de Toledo.
Aprovechamos la comida y por supuesto la posterior sobremesa para comentar la etapa y programar la siguiente, sobre las 20:00 horas y una vez hubimos merendado, cargamos las bicis en los coches y a casita a descansar que el día había sido duro e intenso, pero a la vez había sido muy gratificante, habíamos disfrutado de una buena mañana de bici con los amigos y habíamos disfrutado con la familia del resto de la jornada.
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